Cómo hacer un asado a la cruz como todo un experto

El asado a la cruz es una de las técnicas más antiguas y tradicionales para cocinar carne asada. Es una forma única de preparar un asado en la que la carne se coloca en posición vertical y se cocina lentamente sobre brasas al aire libre. Se dice que esta técnica fue inventada por los gauchos argentinos, quienes necesitaban una forma de cocinar grandes cortes de carne durante sus expediciones en las pampas.

Si estás buscando una experiencia culinaria única y quieres impresionar a tus amigos y familiares con un asado a la cruz verdaderamente delicioso, estás en el lugar correcto. En este artículo, te daremos todos los detalles y consejos que necesitas para hacer un asado a la cruz como todo un experto. Desde la elección de la carne hasta los trucos y técnicas de cocción, te guiaremos paso a paso para que puedas disfrutar de un asado inolvidable.

Índice del artículo

Elección de la carne

El primer paso para hacer un asado a la cruz es elegir la carne adecuada. La elección de la carne es crucial, ya que determinará la calidad y el sabor de tu asado. La mejor opción para un asado a la cruz es un corte de carne magra y tierna, como un lomo, un vacío o un churrasco.

Es importante que la carne tenga un buen marmoleo de grasa, ya que esto le dará sabor y jugosidad a la hora de cocinarla. Busca cortes que tengan una capa delgada de grasa en la parte superior, esto ayudará a proteger la carne durante la cocción.

Antes de comenzar con la preparación del asado, asegúrate de limpiar bien la carne y de retirar cualquier exceso de grasa o membranas. Esto ayudará a mejorar la textura y el sabor de la carne.

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Preparación del fuego

Una vez que hayas elegido la carne, es hora de preparar el fuego. El asado a la cruz se cocina lentamente sobre brasas, por lo que es importante asegurarse de tener un fuego estable y constante.

Comienza por elegir la leña adecuada. La mejor opción es utilizar leña dura, como la de árboles frutales o de roble. Evita utilizar leña de pino u otras maderas resinosas, ya que pueden darle un sabor desagradable a la carne.

Apila la leña en forma de pirámide y utiliza papel de periódico o astillas de madera para encender el fuego en el centro. A medida que el fuego comienza a arder, agrega más leña a los costados de la pirámide para mantener el fuego constante.

Es importante esperar a que las llamas se conviertan en brasas antes de comenzar a cocinar el asado. Las brasas proporcionarán el calor necesario y asegurarán una cocción uniforme de la carne.

Montaje y cocción del asado

Una vez que el fuego esté listo, es hora de montar el asado a la cruz. Para hacerlo, necesitarás una cruz de madera resistente y larga, que tenga al menos dos metros de altura. Clava la cruz en el suelo, asegurándote de que esté bien firme y estable.

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Coloca la carne en posición vertical sobre la cruz, asegurándote de que esté bien sujeta. Puedes utilizar alambre de acero o cordones de cuero para atar la carne a la cruz y evitar que se caiga durante la cocción.

Una vez que la carne esté bien sujeta, coloca el extremo inferior de la cruz en el suelo, inclinando la parte superior hacia el fuego. Ajusta la distancia entre la carne y las brasas según sea necesario para controlar la temperatura de cocción. Recuerda que el asado a la cruz se cocina de manera lenta y prolongada, por lo que es importante tener paciencia y asegurarse de que la carne se cocine de manera uniforme.

Consejos para una cocción perfecta

  1. Utiliza un termómetro de carne: Para asegurarte de que el asado esté cocido en su punto, utiliza un termómetro de carne para medir la temperatura interna. La temperatura ideal para un asado a la cruz es de alrededor de 55-60°C para una carne jugosa y rosada en el centro.
  2. Baña la carne con marinada o salsa: Durante la cocción, puedes bañar la carne con marinada o salsa para agregar sabor y mantenerla jugosa. Utiliza una brocha para untar la carne con la marinada cada cierto tiempo.
  3. Gira la cruz de vez en cuando: Para asegurarte de que la carne se cocine de manera uniforme, gira la cruz de vez en cuando durante la cocción. Esto ayudará a que la carne se dore de manera pareja por todos lados.
  4. Resting de la carne: Una vez que la carne esté cocida, retírala del fuego y déjala reposar durante unos minutos antes de cortarla. El reposo permitirá que los jugos se redistribuyan y la carne se vuelva aún más tierna y jugosa.

Acompañamientos para el asado a la cruz

El asado a la cruz es una comida completa en sí misma, pero eso no significa que no puedas disfrutar de algunos acompañamientos deliciosos. Aquí te dejamos algunas opciones populares:

  • Papas a la crema
  • Pan casero
  • Ensalada criolla
  • Chimichurri
  • Chorizos

Estos acompañamientos complementarán perfectamente tu asado a la cruz y añadirán aún más sabor a tu comida.

Conclusión

Ya sea que quieras impresionar a tus amigos en una reunión al aire libre o simplemente disfrutar de una deliciosa comida en familia, hacer un asado a la cruz como todo un experto es una gran opción. Sigue estos consejos y trucos, elige la carne adecuada, prepara el fuego correctamente y cocina el asado con paciencia y amor. Estamos seguros de que el resultado será un asado jugoso, tierno y delicioso que todos disfrutarán. ¡Buen provecho!

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